Pastisseria Artesana Lluís Febrer

La pastelería se considera oficio artesano cuando, a partir de los conocimientos transmitidos a través de la historia, generación tras generación, se elaboran los productos manualmente, rehuyendo el trabajo mecánico y seriado. En el año 1982, Lluís Febrer abrió su pastelería, sucesora de la antigua y prestigiosa Pastisseria Serra. Desde entonces, combina tradición e innovación.

Ha participado en ferias y mercados desde sus inicios, como la Muestra de Cocina y Pastelería de Menorca durante los años 80 y 90, o la primera Feria de Artesanía de Ferreries. Lluís recuerda que eran ferias en las que el sábado se acababa el género y tenía que velar durante la noche para elaborar más para el domingo.

Como curiosidad, hay que comentar que todavía guarda la antigua máquina de hacer besitos, que tiene cedida al Museo del Centro Artesanal de Menorca, junto con la máquina de refinar almendra y varios enseres antiguos. Servía para formar caramelos en forma de bolitas que llevaban la inscripción «Besos de Ferrerías» impresa. Había diferentes rodillos para hacer varias formas de caramelo, pero este modelo exclusivo lo fabricó su maestro, Joan Serra, es Sucrer. La Pastisseria Serra popularizó los caramelos típicos de Ferreries allá por los años 60, pero hoy en día ya no se elaboran.

Hacia el año 2000, iniciaron en la pastelería la línea sin gluten. Actualmente, han pasado a fabricar más sin gluten que con harina tradicional. Realizan envíos fuera de la isla, tanto a establecimientos como a particulares, y tienen pedidos de Mallorca y del resto de la Península. Además, tienen su clientela fiel de Menorca, que se incrementa gracias a los visitantes veraniegos.